Tener un plan de recuperación ante desastres es fundamental para cualquier proyecto. Esto es especialmente cierto en la era digital, donde los datos suelen almacenarse en entornos físicos y digitales, gracias a las soluciones cloud.

Con vistas a la continuidad de negocio, que tengamos capacidad de recuperarnos ante un desastre resulta crucial. ¿Cómo podemos diseñar un plan eficiente ante esa circunstancia?

Cómo crear un plan de recuperación ante desastres

En primer lugar, debemos contar con copias de seguridad de los datos. Esto afecta no solo a la información que tengamos en un equipo concreto, sino a todas las bases de datos, servidores y sistemas con los que contemos y que puedan contener datos relevantes. En pocas palabras: contar con una imagen de todo el servidor, del sistema completo, que podamos recuperar ante cualquier crisis.

Para realizar esas copias de forma efectiva, es importante revisarlas cada cierto tiempo, comprobando que todo funciona correctamente. Además, estas deben estar al día, de manera que en caso de problemas no perdamos información clave.

En segundo lugar, llevar a cabo un Business Impact Analysis (BIA) también nos aportará datos sobre las consecuencias que tendríamos en caso de que algún servicio falle. La continuidad de negocio debe estar siempre garantizada, de manera que contemos con herramientas y soluciones ante cualquier eventualidad. La prevención es, pues, nuestra mejor aliada.

Si contamos con una previsión del impacto que genera la pérdida de cierta información o falta de operatividad de un servicio, podremos actuar implementando medidas que sirvan como cortafuegos. Así, contrarrestamos los efectos que una reacción caótica podría generar. Dar una respuesta organizada y coherente a un problema es la forma más razonable de afrontar la adversidad y controlar los riesgos, minimizándolos.

RPO y RTO: aspectos cruciales para la continuidad de negocio

En tercer lugar, hemos de considerar el Recovery Point Objetive (RPO) y el Recovery Time Objetive (RTO). El RPO representa la pérdida de datos en tiempo que puede sufrir la empresa, contabilizando si se trata de días, horas o minutos. Cuanto menor sea el valor, más fácil será que nos recuperemos.

Con respecto al RTO, hace referencia al margen de tiempo que existe para conseguir que todo vuelva a funcionar con normalidad. Es posible lograr tiempos mejores a través de la previsión, por lo que si contamos con sistemas de respuesta adecuados, podremos lograr recuperar la operatividad de la empresa en un lapso de tiempo pequeño.

En conclusión, elaborar un plan de recuperación ante desastres que contemple todos esos puntos y estrategias es la mejor forma de evitar problemas innecesarios. Con un poco de previsión e implementando medidas de prevención y actuación, es posible salir al paso de cualquier incidencia. Sin duda es algo que nuestros clientes agradecen.

Si deseas ampliar la información, consúltanos directamente.